Este es el segundo año que el colegio de La Angostura participa en esta iniciativa del Instituto Universitario de Ciencias y  Tecnologías Cibernéticas, adscrito a la ULPGC. Cathaisa Jiménez, la tutora de sexto, siguió el consejo de su antecesora. «Me dijo que si teníamos la oportunidad de participar que lo hiciéramos, y ha sido muy motivador. Yo también lo recomiendo», explicó ayer, día en que se despedían de Ciberlandia. Han sido cinco días de taller. Los «profes» llegaron la semana pasada y tras una breve explicación teórica hicieron que los chicos y chicas de la clase se repartieran por grupos. La idea es que cada equipo cree un robot siguiendo unas «bases» y que entiendan cómo desde el ordenador se programa «la máquina». Algo así como saber que los Iphone, las tablets o los portátiles no crecen en los árboles, se fabrican.